domingo, 30 de marzo de 2014

Una corona de hojalata

Mi viejo jugaba al Scrabel vistiendo una capa de pana roja y una corona de hojalata dorada donde lucían piedras de fantasía pegadas con Poxipol. Uno llegaba a casa y allí estaba el Rey que todas las noches disputaba la corona con mi madre frente a un tablero de palabras cruzadas.

Sentado en su falda los veía jugar mientras le contaba mis aventuras. Cazar tigres en el barrio me reportaba importancia y valentía, ante esa mirada de ojos verdes, que ponía cara de sorpresa con el relato de mis hazañas de niño de ocho años. Alimentaba mi fantasía hablándome de la ferocidad de la pantera, de la grandeza de los elefantes, de la elegancia de las jirafas y de la tierra de gigantes que habitaban en un mundo cercano y misterioso.

Un collar de perlas de plástico también adornaba el esbelto cuello de la Reina, mi madre. Los reyes gobernaban un hogar pacífico y numeroso en los confines de la tierra, mi casa.

Mi infancia transcurrió entre anheladas vísperas de navidad, barro en las blancas camisetas recién lavadas, y chapitas redondas, con imágenes de jugadores de fútbol, que chispeaban en los rayos de mi bicicleta azul metalizada. Crecí entre los colchones de hojas amarillas del otoño de mi barrio, y el ardiente verano que derritiendo la brea del pavimento, distorsionaba los contornos de las casas, y las personas en un ondulante vapor gris, como el sinuoso humo de las hornallas.

La vida pasó de repente y la infancia se fue. Despareció aquel reino de amigos adolescentes, de besos escondidos en la penumbra de los pasillos, entre las tupidas tullas de un barrio de calles curvadas, y las primeras sangrías del amor.

Una tarde de sábado encontré su corona sobre el tablero de cartón del juego de cuadriculas. Triplica punto letra. Como los indios de las pampas, que llegado su ciclo de vida, se retiran a la colina para morir en paz.

En su jugada final dejó una estela en el mar, una marca en el árbol, un sendero en la jungla. Una corona de hojalata, una ilusión.

No hay comentarios.:

Publicar un comentario